Jennifer Rae Langreck
Jennifer, dejaste este mundo el primer día de verano y con el otoño aquí pasan los reflejos de tu vida. Tu mundo fue ensombrecido por lágrimas de abuso que tiñeron y dejaron cicatrices de un alma herida. Fuiste una víctima de la vida a la que no se puede culpar, esa es la culpa y la carga de los demás. Tu compasión y cuidado dieron el regalo de la vida a los demás y sé que les desearías salud, sanación, felicidad y mucho amor.
Pienso en ti y me doy cuenta de lo mucho que perdí, tu rostro, tu voz, tu sonrisa y tu amabilidad. Siempre te sostendré con fuerza en mi corazón y allí permanecerás.
El mañana no está prometido a nadie.
*Veterana de la Fuerza Naval de los Estados Unidos *